UN NOMBRE PARA UN NUEVO PAÍS


Un nombre para un nuevo país.

Por Aurelio Nicolella


Una vez declarada la independencia del nuevo país, y llegada la pacificación de todo el territorio, fue necesario dictar una constitución que diera reglas a la nueva patria que emergía en América del Sur, es así que en 1829, se comenzó a debatir un proyecto de constitución nacional presentado a la Asamblea Constituyente convocada la que debía redactar la constitución del nuevo país, dicha asamblea tardo casi cuatro meses en debatir el proyecto original. Uno de los puntos que más tiempo llevo fue precisamente el nombre del nuevo país.
Ya en el proyecto original llamaba a todo el territorio “Estado de Montevideo”, dicho artículo 1º rezaba: “El estado de Montevideo es la asociación política de todos los ciudadanos comprendidos en los nueve departamentos actuales de su territorio”.
Con ello se origino un rico debate dentro de la Asamblea, es así que un fuerte opositor a dicho nombre resulta ser el Diputado Lázaro Gadea, alegando que Montevideo solamente formaba parte de una parte del territorio del nuevo estado y por lo tanto, poner dicho nombre a todo el territorio nacional, no hacia justicia a la verdad de las demás regiones que componían el país, que lucharon a la par con la gente de la capital, para lograr la independencia del dominio luso-español como así también de las ambiciones brasileñas.
Por lo tanto proponía como nombre del nuevo estado el de “Estado Oriental” por ser una forma por demás representativa de toda la región, ya que Gadea argumentaba que así debía llamarse por ser la antigua Provincia Oriental y por ser la que originariamente se encontraba más al este del antiguo Virreinato del Río de la Plata.
Pero un férreo opositor a ello sería el Dr. José Ellauri quién sostenía el proyecto original manifestando que la nueva nación debía llevar el nombre de Montevideo, ya que los territorios que pertenecieron a la corona española y hoy se encuentra independientes y siendo repúblicas han tomado el nombre de la capital para todo su territorio.
El debate se profundiza llegando a intervenir otros representantes proponiendo un nombre alternativo a los que sé debatían como el de “Estado del Nord-Argentino” que fuera presentado por el Sr. Solano García y el de “Estado Oriental del Uruguay”, siendo esta última la propuesta triunfadora en la sesión del día 7 de mayo de 1829, la constitución del nuevo estado fue aprobado el día 10 de septiembre de 1829 y jurada el día 18 de julio de 1830, en donde figura en su artículo primero el nombre de “Estado Oriental del Uruguay”, artículo que fuera modificado en la reforma constitucional de 1918 en donde se adopta la forma definitiva de “República Oriental del Uruguay”, la que prevalece en nuestros días.